Pese a los tiempos que corren, aún no se es consciente de la importancia de un logotipo en una empresa. Y mucho menos en la creación, desde cero, de una empresa. Lo primero que se nos pasa por la cabeza cuando nos adentramos en el emprendimiento es el: “quizás apenas necesite un logo”.
Es un arma importantísima para que tu marca sea importante, igual o más que tener productos de alta calidad o referencias o reseñas destacables.
Llamada a la atención
Los períodos de atención son demasiado cortos. El hecho de captar impresiones positivas por el siempre hecho de reconocer un logo y darle a la marca valores a través de este es el primer pasado de cara a captar el primer cliente potencial.
Se trata de la primera presentación a los consumidores de tu marca. El hecho de poder causar sensación sobre los mismos hará que les “levante” la curiosidad sobre el ahondar más sobre tu marca.
La importancia de un logotipo en la identidad
Los tonos, los colores y las formas de un logo narran una historia: la historia de tu marca. Consiste en contarla de forma que emocione o guste. ¿Y cómo se hace? A través de la combinación de formas y colores que genere más impacto y reconocimiento de la marca a la misma vez.
Tu logo estará presente en todos los materiales de tu marca, como membretes, tarjetas de visita o la misma página web. Esto hará crear una identidad de marca concreta y, a la vez, comercializable.
Distinción ante la competencia
Un logotipo debe ser único, porque hay que decirle a los consumidores que lo que ofreces es distinto al resto. El buen diseño de un logo puede comunicarlo todo, desde la misión de la empresa en términos de eficiencia, entrenamiento e innovación; a los fundamentos de la misma como si tiene una personalidad profesional, divertida o relajada.
Se trata de definir en tu logo los valores y enseñar a los consumidores por qué eres el mejor entre tu competencia.
El público lo está esperando
Lo primero que buscará tu público de ti como empresa será el logotipo. Lo hará en cualquier comunicación de tu marca como folletos, tarjetas de visita o cualquier otro tipo de material de marketing.
Un logo da consistencia con el tiempo. Que tu marca sea reconocida como la mejor entre la competencia hará que, el usuario, con el simple hecho de ver tu logo en un producto, decida comprarlo por la garantía que le ofrece como marca. Algo parecido parece cuando vemos una prenda con el símbolo de Adidas. Conocemos que son productos de calidad y el logotipo nos deriva a reconocer la marca.
En conclusión, un logotipo es el primer paso para emprender con sentido. Da un reconocimiento de marca y causa la primera impresión sobre un cliente potencial. ¿Y qué mejor que empezar bien ahí?
